martes, 31 de diciembre de 2024

No te quedes acá

Hoy rompo parcialmente la singular tradición de publicar el último día del año. Digo "parcialmente" porque técnicamente estoy cumpliendo, pero esta vez no con un microrrelato, sino con algo que considero igual de interesante. Incluso más.

domingo, 31 de diciembre de 2023

Sermón para un charango


 ¿Ves estas cuerdas? ¿Ves estas morsas? Esto es más que el taller de un fabricante de guitarras, Samuelito. Este es el oficio de un hombre. Así como yo me gané la vida con esto, me encantaría que vos también lo hicieras cuando seas mayor. Con esto le di de comer al gil de tu padre.
 ¿Ves estos tajos y estas ojeras? Son de orgullo, pibe. No como tu viejo que las únicas ojeras que tiene las ganó con la paja. Él es un malagradecido que, duele decirlo, pero nunca hizo nada bien. El boludo no fue capaz ni de darme un nieto.


sábado, 31 de diciembre de 2022

Doctor Paciencia

 


 Aquel médico era una eminencia: se recibió en menos de cinco años e hizo un posgrado en Italia con solo 26. Siempre se destacó, curricular y laboralmente. Sus compañeros aún recuerdan su personalidad hilarante y el lugar central que ellos mismos le concedieron en todos los ámbitos posibles. Aquel médico, era un buen tipo.
 Se llevaba bien con todos. Dos por tres rechazaba sus honorarios en pos de ayudar a gente necesitada y hacía horas extra para que nadie quedara sin atención.
 Aquel médico durmió para siempre a quince personas con sobredosis de heroína. 


viernes, 31 de diciembre de 2021

Yo te esperaré

 

 María Eugenia estaba harta de soportar los berrinches en público de su hijo Tiziano, de dos años. Necesitaba hacer una compra en una estación de servicio, así que prefirió dejarlo en el auto, aunque bajo el estricto juramento de que se portaría bien durante los minutos en que ella estuviera ausente. 
 La tarea de la mujer duró aproximadamente ocho minutos, por lo que salió del minimercado de la estación con bastante prisa. Pero su sorpresa y desesperación fueron grandes cuando se dio cuenta que su pequeño ya no estaba en el vehículo. Desesperada, pidió ayuda a los playeros, con quienes revisó la parte trasera del lugar.  Sin éxito en la búsqueda, y con lágrimas de desconsuelo, volvió junto a los empleados a la zona donde estaban antes.
 La dicha de María Eugenia no cupo en su pecho cuando encontró a Tiziano parado en la playa de estacionamiento. Pero, el que había desaparecido ahora, era su auto.

jueves, 31 de diciembre de 2020

La vida en verde


 Existía un pueblo vasto pero condenado a la sequía y la miseria desde hacía al menos un siglo. El día en que un grupo de investigadores llegó para estudiar el monte más elevado de la zona, hubo mucha curiosidad por parte de los habitantes, desacostumbrados a recibir visitas tan numerosas.
 Los profesionales, expertos en geología y arqueología, hicieron un descubrimiento brillante, ante los ojos expectantes de la gente de allí: mediante pinturas rupestres, revelaron que el pueblo había sido una enorme jungla, siete siglos atrás.